Allí, no solo convivirá con diversos chicos y chicas de diferentes puntos de España, sino también con una psicóloga, profesores y un extraño tutor treintañero llamado Óscar, que le provocará más de un quebradero de cabeza.
Desde luego, no sin razón, pues un potencial agresor sexual anda suelto.
Clara by Bárbara Martín Olivera
My rating: 3 of 5 stars
Me ha resultado bastante complicado valorar este libro porque creo que trata un tema lo suficientemente delicado como para que sea sencillo poder quedarte en los extremos y quizá precisamente por eso, por esas luces y esas sombras, siento que lo más adecuado es que mi opinión quedase en un punto intermedio.
Clara es una adolescente única superviviente de un accidente de aviación en el que perecen tanto sus padres como su hermano menor y dada su condición de huérfana, queda desamparada y termina viviendo en un centro de acogida de menores de la comunidad de España. Allí podrá tratar de salir adelante junto con otros chicos de edades similares pero con unas circunstancias diferentes aunque igualmente condicionadas a que no exista una familia que pudiera hacerse cargo de ninguno de ellos. Evidentemente, en ese centro hay una psicóloga y varios profesores, entre los que se encuentra Óscar, un profesor y en este caso además tutor de Clara con quien mantendrá una extraña relación de tira y afloja derivada de unos sentimientos aún por concretar en ambas partes. Además, y aunque este centro esté considerado como un centro ejemplar y uno de los mejores de la comunidad, hay un agresor sexual que anda suelto y al que tendrán que intentar identificar antes de que pueda llegar a ser demasiado tarde, puesto que ya ha logrado crear una grave problemática en el lugar sin haber podido ser identificado.
Quizá es un libro un tanto enrevesado para lo que yo suelo leer y considero que lento en exceso. Hay momentos en los que no pasa nada y que incluso lo que pasa nunca se llega a solucionar, no se habla, no se desarrolla y no sabría concretar por qué está ahí y a su vez hay demasiadas cosas que se quedan en el aire y que podrían hacerte comprender el por qué de cada acontecimiento, de cada personalidad y de cada acción. Todo esto puede lograr que pierdas un poco el hilo, te frustres y sientas algo de monotonía en la historia. También es verdad que los adolescentes son así y esta frase podría aplicarse a casi cualquier situación en la que intervengan… Supongo que a propósito de esto tampoco me sentí identificada ni sentí cierta debilidad por ninguno de los personajes, tanto por edad, como por personalidad y evidentemente por circunstancias. Pero ya digo, es un tema demasiado controvertido como valorarlo si no tuviésemos en cuenta que es un libro, que es una historia ficticia (aunque la realidad en muchos casos supere a la ficción) y que debemos juzgarlo como tal.
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Libro anterior: Reseña de Mientras dure la tormenta, de Estefanía Jiménez.
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