sábado, 16 de julio de 2011

La princesa busca marido (Jorge Bucay)


Había una vez una princesa, que quería encontrar un esposo digno de ella, que la amase verdaderamente. Para lo cual puso una condición: elegiría marido entre todos los que fueran capaces de estar 365 días al lado del muro del palacio donde ella vivía, sin separarse ni un solo día. Se presentaron centenares, miles de pretendientes a la corona real. Pero claro al primer frío la mitad se fue, cuando empezaron los calores se fue la mitad de la otra mitad, cuando empezaron a gastarse los cojines y se terminó la comida, la mitad de la mitad de la mitad, también se fue.

Habían empezado el primero de Enero, cuando entró Diciembre, empezaron de nuevo los fríos, y solamente quedó un joven. Todos los demás se habían ido, cansados, aburridos, pensando que ningún amor valía la pena. Solamente éste joven que había adorado a la princesa desde siempre, estaba allí, anclado en esa pared y ese muro, esperando pacientemente que pasaran los 365 días. La princesa que había despreciado a todos, cuando vio que este muchacho se quedaba empezó a mirarlo, pensando, que quizás ese hombre la quisiera de verdad. Lo había espiado en Octubre, había pasado frente a él en Noviembre, y en Diciembre, disfrazada de campesina le había dejado un poco de agua y un poco de comida, le había visto los ojos y se había dado cuenta de su mirada sincera. Entonces le había dicho al rey:

- Padre, creo que finalmente vas a tener un casamiento, y que por fin vas a tener nietos, este es el hombre que de verdad me quiere.


El rey se había puesto contento y comenzó a prepararlo todo. La ceremonia, el banquete e incluso, le hizo saber al joven, a través de la guardia, que el primero de Enero, cuando se cumplieran los 365 días, lo esperaba en el palacio porque quería hablar con él.

Todo estaba preparado, el pueblo estaba contento, todo el mundo esperaba ansiosamente el primero de Enero. El 31 de Diciembre, el día después de haber pasado las 364 noches y los 365 días allí, el joven se levantó del muro y se marchó. Fue hasta su casa y fue a ver a su madre, y ésta le dijo:

- Hijo querías tanto a la princesa, estuviste allí 364 noches, 365 días y el último día te fuiste. ¿Qué pasó?, ¿No pudiste aguantar un día más?

Y el hijo contestó:

- ¿Sabes madre? Me enteré que me había visto, me enteré que me había elegido, me enteré que le había dicho a su padre que se iba a casar conmigo y, a pesar de eso, no fue capaz de evitarme una sola noche de dolor, pudiendo hacerlo, no me evitó una sola noche de sufrimiento. Alguien que no es capaz de evitarte una noche de sufrimiento no merece de mi, Amor, ¿verdad madre?


Cuando estás en una relación, y te das cuenta de que pudiendo evitarte una mínima parte de sufrimiento, el otro no lo hace es, porque todo se ha terminado.

18 comentarios:

  1. Y cuánta razón llevaba el príncipe. Por eso muchas veces es mejor decir "fue bonito mientras duró".

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  2. Pero no entiendo muy bien que la morleja comience con un "cuando estás en una relación..." si ellos no llegaron a ello... No me coinciden ambas historias...

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  3. Bueno, es que "estar en una relación" no implica que estés enamorado de la otra persona. Supongo que para Bucay la relación entre estos dos personajes es algo que existe aunque no se llega a producir. Ciertamente hay "amor" entre ellos, sólo que no se lo llegan a mostrar porque ella lo estropea todo antes de darle una oportunidad... Creo que me he liado XDD

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  4. Yo tampoco hablé de amor, pero para que haya una relación, mínimo tendrían que conocerse o algo... Es un poco... Abstracto. Pero no se llega a producir nada, así que tampoco se puede hablar de una relación. Es un poco como lo de echar de menos algo que nunca tuviste, ¿se puede? o_O

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  5. Supongo que si, se puede echar de menos algo que no has tenido porque, si alguna vez has sentido que estabas cerca de conseguirlo pero, cuando estás a punto lo pierdes... Aunque no llegues a tenerlo has estado tan cerca que era como si lo tuvieses.

    No sé si me explico, es que hoy estoy que no estoy...

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  6. Pero quizá si eres de esas personas que luchan por conseguir algo y luego ya no lo quieren, no le darías tanta importancia y no podrías echarlo de menos si no lo tuviste...

    Joer, ¡qué filosóficas! xD

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  7. Qué tonta!! Te he escrito un comentario y lo he cerrado antes de darle para que se publique XDDD

    Pues eso, que te decía que supongo que ella se siente triste porque ha visto su sueño muy cerca de cumplirse y sabe que lo ha estropeado por ser tonta. Él, en cambio, se siente triste porque de verdad ha llegado a querer a la princesa aún no teniendo el amor de ella pero ha visto como ella no le ha tratado bien y ha decidido renunciar a su amor antes que sufrir a su lado...

    El verano nos pone filosóficas, qué cosas...

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  8. A veces pasa xD

    Yo creo que ambos son muy orgullosos y pierden mucho por tontos. Si la chica pide 365 días y tú aceptas, pues aceptas, ¿acaso en los otros 364 no sufriste? Y la chica, al ver que sólo quedaba él, podría haberle ahorrado un día de frío, aunque no quisiese verle. Una duchita, una manta y comida... Y ya al día siguiente, se cumple la fecha. :S

    Cierto es. Me encanta el verano :P

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  9. Si, la verdad es que ambos tienen ese problema. Pero claro, el príncipe tiene más motivos, al menos para mí, ha sufrido mucho por amor y tiene miedo de seguir sufriendo... Comprendo que prefiera rendirse XDD

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  10. El principe lo hizo voluntariamente los 364 días, nadie le obligó, pero no aguantó y le echa la culpa a la princesa... :(

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  11. También es cierto. Pero se suponía que la princesa no iba a hacer nada por conocerle hasta pasado los 365 días, sin embargo no puede evitarlo y se disfraza para verle... Y eso duele. Sabes que has estado sufriendo y la otra persona, que ha asegurado no verte hasta pasado el plazo, te ha visto sufrir y no ha hecho nada por impedírtelo...

    Eso si, no quita que él eligió voluntarimente quedarse, y eligió voluntariamente irse. Ambos son culpables de lo que les pasó, pero sólo quieren ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio...

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  12. Lo de la relacion es un poco dificil de entender si, pero la historia me a encantado! y esque a veces luchas tanto por algo, te centras tanto por algo, insistes tanto en algo que cuando estas a punto de conseguirlo te planteas si realmente a merecido la pena... El amor es cosa de dos. Cuando una sola parte es la que da sin recibir nada a cambio te hace plantearte esas dudas ke el joven se plantea, y es que si yo soy capaz de dar un año de mi vida por ti, y tu realmente quieres pasar el resto de tu vida conmigo... que menos que des un poco de cariño, un poco de comprension, un poco de amabilidad y un poco de calor. Y esque recibir es muy sencillo pero saber dar ya es algo mas complicado.
    Yo ahora me encuentro un poco en la situacion en la que esta el principe y espero que mi final sea algo parecido...
    Hay que luchar por lo que se quiere, pero hay que querer realmente por lo que se lucha, y debes comprender que por mas que intentes que te quieran, no es algo voluntario, y si no te llega ese momento, creo que la mejor opcion es que hagas borron y cuenta nueva... al fin y al cavo la vida son dos dias y se han echo para vivirla....
    mi blog de hoy va mas o menos de una historia parecida a esta jajaja pero aun no tiene final xD

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  13. Pero verle (Isa) no es lo mismo que conocerle. Por lo tanto, ella sí cumplió su parte. Él no.

    Además, iba disfrazada, él no pudo sentir dolor puesto que ni siquiera la reconoció.

    Creo que el amor –en estos tiempos que corren y en los de antes, aunque no debería ser así- tiene gran parte de sufrimiento y si tú lo aceptas, luego no es “correcto” quejarse por ello. Es como dar algo sin pedir nada a cambio, pero si no recibes nada, quejarte.

    Ey, Nata, lee si te apetece la siguiente entrada a esta. En uno de los libros de los que hablo (el titulado “Cuentos para pensar” de Jorge Bucay) viene esa historia con otras más que deben ser similares. Por eso me lo quiero comprar. :)

    El caso es que el tema del amor –en el que no estoy para nada puesta- es tan complicado, que no podría dar mi opinión y decir que es la correcta, pero yo estoy de acuerdo con la chica. Si ella pone condiciones y la gente las acepta, luego no es justo obtener quejas por su parte. Aunque comprendo al pobre chico. :) En una versión actual, seguro que el chico sólo buscaba casarse con la princesa para hacerse príncipe, como se suele decir, por el interés xD ¡Qué bonito es el amor! xD

    Desde luego yo no soy de las personas que luchan por algo que no quieren. Tengo las cosas demasiado claras y quizá eso sea más un defecto que una virtud. No cambio de parecer así como así, pero la gente sí lo hace y me acaba pasando como al príncipe a pesar de situarme del lado de la princesa.

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  14. Me ha gustado, tiene bastante parte de razón el cuento...

    Sobre el debate que habéis tenido por ahí arriba, yo diría que no es sólo cuando se está en una relación, sino cuando se quiere comenzar... Yo creo que Bucay lo expresó mal, para mí sería algo así como:

    "Cuando se quiere comenzar una relación y uno sabiendo que el otro lo está pasando mal no hace nada por evitarlo, es que realmente no siente nada".

    Pero, vamos, es mi interpretación XD

    Sobre lo de que él aceptó las condiciones desde el principio, es cierto, pero hay veces que se aceptan unas condiciones esperando que la otra persona demuestre que merece la pena cumplirlas.

    Por ejemplo, en una relación a distancia, las dos personas se comprometen a cumplir la condición de esperar, ser fieles, etc... La cosa es que si en el tiempo en que estás en una relación a distancia, notas que tú lo estás dando todo mientras la otra persona está dando la mitad, ¿realmente tienes que seguir cumpliendo aquello a lo que te comprometiste?

    No sé, yo creo que en ese caso está justificado que el que sí está dando todo se frustre y decida que no vale la pena...

    En fin, divagaciones XD Besitos!!!

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  15. Uf, no me hables de comienzos, no me hables de comienzos... Si el comienzo ya va mal... ¿Para qué comenzar? Pero nos empeñamos y... Lo peor es cuando se cree que todo va a ir bien y te engañas a ti mismo. Y digo que te engañas porque sabes perfectamente que va a ir mal. Y ya si después de darte cuenta de todo esto y piensas que entonces será la otra persona la que cambiará, apaga y vámonos.

    Me gustan tus divagaciones :P

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  16. Este cuento me agrado mucho, Bucay me sigue sorprendiendo la forma en la que plantea las situaciones humanas.

    Me tomo el atrevimiento de escribir mi opinión sobre la historia y con respecto a lo que han estado conversando.

    Cuando una persona desea algo, sea por amor, ilusión o interés, somos capaces de aguantar muchas situaciones para ver cumplido nuestro objetivo; y eso es precisamente lo que el hombre hizo, acepto la condición y por ello el trato (relación: trato o unión entre dos o mas personas) para poder verse unido a la persona que en su momento era su amor.

    Es claro que cuando nos vemos defraudados nuestro pensar y nuestro sentir se ve quebrantado y replanteamos, todo esto sucedió, cuando se enteró que la princesa estuvo paseándose por el lugar en varias ocasiones por donde él estaba, porque a pesar de que fue el último en quedar, la princesa no fue flexible para eliminar ese sufrimiento de la persona con quien compartiría el amor que se generará, ella esperaría hasta el último momento para hacer efectivo el trato para casarse.

    Quien no te corresponde desde un comienzo por la forma en la que te entregas en una relación a pesar de que te vea sufrir, no merece tu amor. Es por ello que haciendo valer el amor propio, el hombre decide retirarse porque sabe que su sentir no sería correspondido.

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  17. Anónimo, estás invitad@ a escribir en mi blog siempre que quieras.

    Además, estoy completamente de acuerdo con tu opinión. Es verdad que el corazón tiene mucho poder, un poder algo más irracional que el de nuestra cabeza; pero una vez te han defraudado, el corazón y la cabeza se quedan en una misma opinión: no merece la pena.

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