Es lo que tiene estar lesionada y poder saltarse algunos entrenamientos, que te quedas en casa sin poder hacer demasiado tampoco, el aburrimiento se adueña de ti y buscas nuevos métodos de... ¿Expansión? Y sobre todo, entretenimiento.
Hoy os voy a hablar de mi nueva adicción: Game of War.
El caso es que al principio, cuando me regalaron el iPad, creía que no me iba a adaptar a él y que seguiría obnubilada llevando el iPhone a todos lados, especialmente porque hasta ese momento, el Facebook (o más bien las personas a las que veía a diario en él) eran mi pequeño vicio confeso. Lo del Facebook salió rana y poco a poco el iPad y yo nos fuimos haciendo más y más amigos. Una vez te acostumbras, el mediano de la familia Apple (para mí, el Mac es el hermano mayor y el iPhone, el pequeño) no decepciona. Diferentes juegos, mismas posibilidades y pantalla más grande que hace que no tengas que mirar los gráficos como si fueras chino, que no miras, sospechas. *Chiste fácil y bastante tonto sobre asiáticos, que nadie se me enfade*
Apple, las App o simplemente todos los móviles inteligentes (no sé si es en concreto cosa de Apple o pasa con todos los dispositivos) tienen un pequeño defecto que no soporto y es la interminable cantidad de anuncios, publicidad propaganda y demás intentos de venderte todo tipo de Apps con las que gastar dinero real. En ocasiones por un despiste y en otras por una obsesión o, tal vez impaciencia por avanzar en determinados juegos, terminas cayendo de lleno y gastando mayor o menor parte de tu sueldo en los juegos. Yo soy una de las personas que, como os digo, no soporta ningún tipo de propaganda en mi dispositivo que me anime a gastar dinero real, pero como es una lacra por ahora imposible de evitar, lo que hago es no aguantar el anuncio pero no gastar ni un céntimo. Por ello, cada una de las App de mi móvil es, y ha sido siempre, gratuita. A pesar de esto, ahora hay una nueva moda para conseguir que descargues algunas App (de pago y gratuitas) que consiste en estar leyendo el Facebook, Twitter o alguna web de internet y que de repente, tu aparato, como poseído por un ente endemoniado, se vaya directamente a la página donde descargar la aplicación. De nuevo vuelves al sitio inicial que estabas mirando antes de la interrupción y, otra vez como por arte de magia, vuelves a estar en la página de descarga de la App. He llegado a esta situación varias veces y en su mayoría, la aplicación que intentaban hacerme descargar era Game of War. Estaba tan harta de no poder buscar información o ver una simple foto tranquila sin ser redireccionada al maldito Game of War, que al final terminé por adaptarme a la famosa frase de El Arte de la Guerra (y nunca mejor elegido el tema): 'If you can't win them, join them' (si no puedes con tu enemigo, únete a él).
Me lo descargué. Y me gustó. Mucho.
En realidad lo que más me gustó no es el juego en sí, que también. Ya había jugado a juegos muy parecidos, de hecho, me recordó mucho al Tzar, juego que me encontré un día en la calle tirado y al que sigo jugando de vez en cuando.
Es un juego de guerra, de estrategia, de recolección, de alianzas, tránsfugas, enemigos, traidores, compañeros... Entretiene. Pero una de las partes del juego que más me gusta y que nunca pensé que me iba a gustar es la compenetración que terminas teniendo con los demás compañeros de tu alianza. Normalmente hay miles de alianzas a las que poder unirte, que se reparten además en diferentes reinos, que son aliadas de otras, enemigas, individuales, familiares, más fuertes, menos, da igual. El caso es compartir experiencias y para eso, cada alianza posee un chat (y también un apartado con mensajes privados) para poder hablar con tus compañeros. Siempre es mejor buscar o encontrarse una alianza en la que hablen tu idioma pero, sobre todo, es importante que encuentres una alianza en la que te sientas bien y para eso, el juego te ayuda con una traducción que, a mi parecer, deja un poco que desear pero que también fomenta que puedas entenderte mejor con todo el mundo a pesar de que no siempre vas a encontrar una buena alianza en la que se hable tu lengua.
Echadle un vistazo:
Yo comencé en una alianza rusa, pero estaba lejos de mi reino y no me podía teletransportar (mover cerca de ellos) así que tras continuos ataques y la confirmación de que no me ayudaban demasiado, con el tiempo terminé uniéndome a otra alianza global en la que se suponía que se hablaban todos los idiomas y que estaba mucho más cerca de donde yo me encontraba. Aún así y aunque me iba bien, el traductor no me permitía entender todo lo que allí se decía, así que de nuevo volví a cambiarme de alianza, esta vez con teletransportación incluida e idioma español como lengua principal de la alianza. Esta alianza tuvo unos problemas de traiciones y trásfugas que, de nuevo, hicieron que se disolviera y que me tuviese que mudar oooootra vez a unas coordinadas diferentes. Una vez llegué, el trato con esta nueva alianza no fue muy agradable. No entiendo por qué ni por qué no, e incluso mucha gente de la alianza tampoco entendió las razones, pero un par de personas entre las que me encuentro, fuimos invitados muy amablemente a irnos a tomar por saco. Tres veces.
Y por fin a los pocos días, encontramos una alianza cercana donde no sólo se hablaba español, sino que nos acogieron y ayudaron en todo. Incluso una vez arriesgué todas mis tropas en una aventura kamikaze para vencer a un súper leprechaun de nivel 4. Bueno, si no conocéis el juego, evidentemente no tendréis ni idea de sobre qué estoy hablando... Y además y para intentar ayudar a la alianza, incluso he llegado a crear otra alianza familia de esta en la que poder refugiarnos mientras somos atacados por alianzas más poderosas. Mi lema es: 'Si tú no me atacas, yo no te ataco a ti, pero ay de ti, amig@ si me atacas y tengo el suficiente poder como para vengarme...' y es que en el juego es en el único aspecto de la vida en el que me permito ser vengativa y rencorosa. Si tú fuiste mi amiga@ y terminaste mal conmigo, puedes hablarme después de 7 meses, o hasta 7 años después, que yo no te guardaré rencor y actuaré como si nos acabásemos de conocer. Pero como haya sido en el juego donde me atacaste...
Si queréis empezar en el juego, comentádmelo. Os ayudaré y os añadiré a mis alianzas, seremos vecinos y nos ayudaremos frente a la adversidad. E incluso pondremos el culo en pompa cuando los gobernantes vengan a por nosotros (como la vida misma...).
Hoy os voy a hablar de mi nueva adicción: Game of War.
El caso es que al principio, cuando me regalaron el iPad, creía que no me iba a adaptar a él y que seguiría obnubilada llevando el iPhone a todos lados, especialmente porque hasta ese momento, el Facebook (o más bien las personas a las que veía a diario en él) eran mi pequeño vicio confeso. Lo del Facebook salió rana y poco a poco el iPad y yo nos fuimos haciendo más y más amigos. Una vez te acostumbras, el mediano de la familia Apple (para mí, el Mac es el hermano mayor y el iPhone, el pequeño) no decepciona. Diferentes juegos, mismas posibilidades y pantalla más grande que hace que no tengas que mirar los gráficos como si fueras chino, que no miras, sospechas. *Chiste fácil y bastante tonto sobre asiáticos, que nadie se me enfade*
Apple, las App o simplemente todos los móviles inteligentes (no sé si es en concreto cosa de Apple o pasa con todos los dispositivos) tienen un pequeño defecto que no soporto y es la interminable cantidad de anuncios, publicidad propaganda y demás intentos de venderte todo tipo de Apps con las que gastar dinero real. En ocasiones por un despiste y en otras por una obsesión o, tal vez impaciencia por avanzar en determinados juegos, terminas cayendo de lleno y gastando mayor o menor parte de tu sueldo en los juegos. Yo soy una de las personas que, como os digo, no soporta ningún tipo de propaganda en mi dispositivo que me anime a gastar dinero real, pero como es una lacra por ahora imposible de evitar, lo que hago es no aguantar el anuncio pero no gastar ni un céntimo. Por ello, cada una de las App de mi móvil es, y ha sido siempre, gratuita. A pesar de esto, ahora hay una nueva moda para conseguir que descargues algunas App (de pago y gratuitas) que consiste en estar leyendo el Facebook, Twitter o alguna web de internet y que de repente, tu aparato, como poseído por un ente endemoniado, se vaya directamente a la página donde descargar la aplicación. De nuevo vuelves al sitio inicial que estabas mirando antes de la interrupción y, otra vez como por arte de magia, vuelves a estar en la página de descarga de la App. He llegado a esta situación varias veces y en su mayoría, la aplicación que intentaban hacerme descargar era Game of War. Estaba tan harta de no poder buscar información o ver una simple foto tranquila sin ser redireccionada al maldito Game of War, que al final terminé por adaptarme a la famosa frase de El Arte de la Guerra (y nunca mejor elegido el tema): 'If you can't win them, join them' (si no puedes con tu enemigo, únete a él).
Me lo descargué. Y me gustó. Mucho.
En realidad lo que más me gustó no es el juego en sí, que también. Ya había jugado a juegos muy parecidos, de hecho, me recordó mucho al Tzar, juego que me encontré un día en la calle tirado y al que sigo jugando de vez en cuando.
Es un juego de guerra, de estrategia, de recolección, de alianzas, tránsfugas, enemigos, traidores, compañeros... Entretiene. Pero una de las partes del juego que más me gusta y que nunca pensé que me iba a gustar es la compenetración que terminas teniendo con los demás compañeros de tu alianza. Normalmente hay miles de alianzas a las que poder unirte, que se reparten además en diferentes reinos, que son aliadas de otras, enemigas, individuales, familiares, más fuertes, menos, da igual. El caso es compartir experiencias y para eso, cada alianza posee un chat (y también un apartado con mensajes privados) para poder hablar con tus compañeros. Siempre es mejor buscar o encontrarse una alianza en la que hablen tu idioma pero, sobre todo, es importante que encuentres una alianza en la que te sientas bien y para eso, el juego te ayuda con una traducción que, a mi parecer, deja un poco que desear pero que también fomenta que puedas entenderte mejor con todo el mundo a pesar de que no siempre vas a encontrar una buena alianza en la que se hable tu lengua.
Echadle un vistazo:
Yo comencé en una alianza rusa, pero estaba lejos de mi reino y no me podía teletransportar (mover cerca de ellos) así que tras continuos ataques y la confirmación de que no me ayudaban demasiado, con el tiempo terminé uniéndome a otra alianza global en la que se suponía que se hablaban todos los idiomas y que estaba mucho más cerca de donde yo me encontraba. Aún así y aunque me iba bien, el traductor no me permitía entender todo lo que allí se decía, así que de nuevo volví a cambiarme de alianza, esta vez con teletransportación incluida e idioma español como lengua principal de la alianza. Esta alianza tuvo unos problemas de traiciones y trásfugas que, de nuevo, hicieron que se disolviera y que me tuviese que mudar oooootra vez a unas coordinadas diferentes. Una vez llegué, el trato con esta nueva alianza no fue muy agradable. No entiendo por qué ni por qué no, e incluso mucha gente de la alianza tampoco entendió las razones, pero un par de personas entre las que me encuentro, fuimos invitados muy amablemente a irnos a tomar por saco. Tres veces.
Y por fin a los pocos días, encontramos una alianza cercana donde no sólo se hablaba español, sino que nos acogieron y ayudaron en todo. Incluso una vez arriesgué todas mis tropas en una aventura kamikaze para vencer a un súper leprechaun de nivel 4. Bueno, si no conocéis el juego, evidentemente no tendréis ni idea de sobre qué estoy hablando... Y además y para intentar ayudar a la alianza, incluso he llegado a crear otra alianza familia de esta en la que poder refugiarnos mientras somos atacados por alianzas más poderosas. Mi lema es: 'Si tú no me atacas, yo no te ataco a ti, pero ay de ti, amig@ si me atacas y tengo el suficiente poder como para vengarme...' y es que en el juego es en el único aspecto de la vida en el que me permito ser vengativa y rencorosa. Si tú fuiste mi amiga@ y terminaste mal conmigo, puedes hablarme después de 7 meses, o hasta 7 años después, que yo no te guardaré rencor y actuaré como si nos acabásemos de conocer. Pero como haya sido en el juego donde me atacaste...
Si queréis empezar en el juego, comentádmelo. Os ayudaré y os añadiré a mis alianzas, seremos vecinos y nos ayudaremos frente a la adversidad. E incluso pondremos el culo en pompa cuando los gobernantes vengan a por nosotros (como la vida misma...).